Janet Yellen, secretaria del Tesoro de Estados Unidos, aceptó que su país está enfrentando “niveles inaceptables de inflación”.
En marzo, el índice de precios al consumidor alcanzó el 8,5% interanual, su nivel más alto en cuarenta años, aunque en abril registró un leve retroceso del 0,2%.
Ante esta situación, durante una audiencia del Comité de Finanzas del Senado, Yellen explicó que “actualmente enfrentamos desafíos macroeconómicos, incluidos niveles inaceptables de inflación”.
Sin embargo, negó que esto estuviese vinculado con la política monetaria del presidente Joe Biden, la cual incluye un Plan de Rescate (ARP) de US$ 1,9 billones para impulsar la recuperación de la pandemia del coronavirus.
“Estamos viendo una alta inflación en casi todos los países desarrollados del mundo. Y tienen políticas fiscales muy diferentes (…) Entonces no puede ser que la mayor parte de la inflación que estamos experimentando refleje el impacto del ARP”, explicó.
Por ello, volvió a insistir con que la inflación está siendo impulsada por los desajustes entre la oferta y la demanda “asociados con las interrupciones causadas por el efecto de la pandemia en las cadenas de suministro y los efectos de las perturbaciones del lado de la oferta en los mercados de petróleo y alimentos como resultado de la guerra de Rusia en Ucrania”.
Yellen también dijo que, en el corto plazo, la inflación se mantendrá alta, aunque tiene “muchas esperanzas de que baje”. Además, recomendó que “para amortiguar las presiones inflacionarias sin socavar la solidez del mercado laboral, se necesita una postura presupuestaria adecuada para complementar las acciones de política monetaria de FED”.
