En el día de ayer, miércoles 17 de diciembre, personal de la Agencia Nacional de Puertos y Navegación (ANPyN) realizó una inspección in situ en las instalaciones del Puerto de Dock Sud, en Avellaneda. La medida fue motivada por una denuncia anónima que advertía sobre posibles irregularidades y riesgos en la infraestructura de uno de los puertos con mayor movimiento del país.

El operativo incluyó una recorrida por sectores críticos de la terminal de contenedores Exolgan y áreas vinculadas a la logística de combustibles de las refinerías locales. Los técnicos de la agencia nacional evaluaron el estado de la infraestructura, realizaron consultas sobre los sistemas de gestión ambiental y analizaron las condiciones del espejo de agua, punto recurrente de quejas por contaminación ante la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR).
La inspección se produce en plena etapa de transición: Mónica Litza acaba de asumir la presidencia del Consorcio de Gestión del Puerto de Dock Sud, reemplazando a Carla Monrabal.
El sector portuario observa con atención estos operativos de la ANPyN. El antecedente inmediato es el Puerto de Ushuaia, donde una inspección similar detectó fallas graves: falta de pilotes estructurales, defensas desgastadas y ausencia de sistemas de seguridad esenciales.

Aquel informe generó eventuales debates políticos y técnicos, donde la provincia patagónica debió presentar un plan de remediación urgente ante la posibilidad de sanciones o intervención. Ahora, se aguarda el reporte técnico sobre Dock Sud para determinar si existen riesgos que comprometan la continuidad operativa de la terminal bonaerense.
Redacción por dataPORTUARIA