La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) ha emitido una advertencia significativa sobre el panorama de la logística global, señalando un período de elevada incertidumbre y una clara desaceleración en el comercio internacional. El organismo proyecta un crecimiento mínimo para 2025, lo que representa uno de los desempeños más débiles observados desde la pandemia.
Según el reciente informe de la UNCTAD, el volumen del comercio marítimo, pilar fundamental del sistema logístico mundial, se expandirá apenas un 0,5% en 2025. Paralelamente, el tráfico contenerizado se prevé que avance un modesto 1,4%. Estas cifras se inscriben en un contexto global caracterizado por la imposición de nuevas barreras arancelarias y una contracción persistente en los pedidos de exportación de las principales economías.
La falta de dinamismo en mercados clave como China y Europa, y una mayor susceptibilidad a los ciclos financieros, restringen la capacidad de expansión logística, incluso en segmentos con demanda estable.
El reporte también subraya riesgos crecientes en las cadenas de suministro de commodities, especialmente alimentos y energía. Actualmente, más del 75% de los ingresos de los principales traders provienen de actividades financieras, lo que amplifica la exposición a shocks sistémicos y puede generar impactos en toda la red logística que moviliza estos productos esenciales.
El acceso al financiamiento comercial ha emergido como una barrera adicional para el funcionamiento óptimo de las cadenas de suministro, afectando particularmente a las pymes en Asia y África y condicionando operaciones de importación y exportación.

La UNCTAD pronostica un crecimiento del comercio mundial de bienes y servicios de entre 3% y 4% en 2025, aunque con una marcada desaceleración proyectada hacia 2026. La implementación de nuevos aranceles podría generar efectos de "contagio". Para América Latina, el informe presenta un panorama paradójico: las exportaciones regionales registraron un crecimiento del 8% en la comparación anual, pero los niveles mensuales no lograron superar los picos observados en diciembre de 2024. No obstante, la UNCTAD destaca que la región conserva oportunidades en segmentos donde la diversificación productiva y una infraestructura logística adaptable permiten una respuesta más ágil a las fluctuaciones de la demanda externa.