Oleoductos del Valle (Oldelval) ha delineado una estrategia de expansión de su infraestructura de transporte de hidrocarburos, fundamental para el sostenido desarrollo del shale oil en la Cuenca Neuquina. La presentación de esta hoja de ruta tuvo lugar durante la jornada “Energía, Producción y Desarrollo Sostenible” en Mar del Plata, donde el ingeniero Luciano Cavallin, Project Manager de Nuevos Proyectos, expuso las inversiones críticas destinadas a mitigar cuellos de botella y asegurar la fluidez operativa del sistema.

Potenciación del corredor Allen -Puerto Rosales

Una de las fases ya concluidas, el Proyecto Duplicar, ha sido crucial al elevar la capacidad de transporte entre las localidades de Allen y Puerto Rosales, pasando de 36.000 a 86.000 metros cúbicos diarios. Esta intervención demandó una reconfiguración hidráulica integral del corredor. Complementariamente, se inauguró un nuevo oleoducto de derivación de 14 pulgadas y 11 kilómetros de extensión hacia la refinería de Bahía Blanca. Esta adición no solo mejora la flexibilidad operativa, sino que también incrementa la redundancia del sistema frente a variaciones de caudal o interrupciones programadas.

El próximo gran hito en la expansión de Oldelval es el Proyecto Duplicar Norte, concebido como la obra de mayor envergadura en la red actual. Consistirá en un nuevo ducto de más de 200 kilómetros y 24 pulgadas de diámetro, con la capacidad de añadir 55.000 metros cúbicos diarios al volumen total inyectado en el sistema. Cavallin indicó que la topografía desafiante de la traza requerirá la implementación de estaciones de bombeo adicionales, equipos de presurización de alta potencia y válvulas de seccionamiento para optimizar la seguridad operativa. Se prevé que la construcción inicie en 2026, con una plena operatividad alcanzada hacia marzo de 2027.

De forma paralela a esta macro-obra, Oldelval está ejecutando un conjunto de mejoras intermedias orientadas a incrementar la capacidad total del sistema a aproximadamente 120.000 metros cúbicos diarios antes de la puesta en marcha de Duplicar Norte. Estas optimizaciones incluyen el perfeccionamiento en el control de presiones, la reingeniería de curvas de bombeo, la sustitución de tramos considerados críticos y la instalación de avanzados sistemas SCADA de monitoreo en tiempo real. Estos últimos son vitales para la gestión de altos volúmenes de shale oil, caracterizado por variaciones en densidad y temperatura.

El incremento del caudal exige una recalibración meticulosa de la pendiente hidráulica del corredor Allen-Rosales, lo que implicará la integración de equipos de bombeo de velocidad variable. Estos dispositivos son esenciales para acomodar los picos de producción y minimizar las pérdidas energéticas asociadas. La compañía también está desarrollando simulaciones de flujo multifásico para prever comportamientos transitorios en secciones donde la temperatura del crudo desciende abruptamente, afectando su viscosidad y, consecuentemente, la capacidad de transporte.

Asimismo, Oldelval evalúa ampliar la capacidad de los tanques pulmón en estaciones estratégicas. Esta medida permitirá una mejor absorción de las fluctuaciones inherentes a la producción de shale, que presenta picos más pronunciados.

Calidad del crudo y modelo operativo futuro

Otro aspecto técnico abordado fue la potencial implementación de la segregación de crudos en función de sus características físico-químicas, según reportó La Mañana de Neuquén. Actualmente, el sistema transporta una mezcla de diversas calidades. Sin embargo, la creciente diversidad del shale oil de Vaca Muerta podría hacer necesaria la disposición de líneas diferenciadas para crudos con densidades API específicas o con mayor contenido de azufre. Esta segregación mejoraría la trazabilidad, reduciría incompatibilidades y optimizaría los procesos en refinerías que demandan cortes más homogéneos.

Finalmente, Oldelval reafirmó su intención de avanzar hacia un modelo de operación unificada en toda la cuenca. La empresa sostiene que este esquema permitiría una reducción de costos operativos, optimización del mantenimiento, prevención de superposición de servicios y una mejor coordinación hidráulica en un sistema que experimenta una demanda creciente debido al auge del shale.

Redacción por dataPORTUARIA