La Entidad Binacional Yaciretá (EBY) anunció la reanudación de las obras del Proyecto Aña Cuá, ubicado en uno de los brazos del río Paraná.
El proyecto prevé la instalación de tres turbinas Kaplan de eje vertical, cada una con una potencia de 90,20 MW, totalizando más de 270 MW adicionales. Esta nueva capacidad no solo refuerza la estabilidad del sistema interconectado de ambos países, sino que se proyecta que generará ingresos cercanos a US$ 80 millones anuales para la EBY, basándose en los valores de energía acordados.
Aña Cuá aportará una producción anual cercana a los 2.000 GWh. La infraestructura incluye un vertedero con 16 compuertas radiales capaz de evacuar 40.000 m3, manteniendo el crucial caudal ecológico para la fauna ictícola. La reactivación fue posible tras gestiones conjuntas entre los gobiernos y el consorcio Aña Cuá WRT (integrado por Webuild, Rovella Carranza y Tecnoedil).
La iniciativa se apoya en un avance físico cercano al 40\% que la obra tenía antes de la paralización. Pese a las demoras, la EBY estima que, bajo el nuevo cronograma, la primera turbina entrará en funcionamiento operativo en 2028.

La reanudación de los trabajos trae un beneficio económico y social inmediato a la región de la zona de frontera. Se estima la creación de alrededor de 1.000 nuevos puestos de trabajo, que se distribuirán equitativamente entre trabajadores argentinos y paraguayos.
Este movimiento laboral, sumado a la demanda de bienes y servicios asociados para la construcción y operación, dinamizará las economías del NEA (Noreste Argentino) y del sur paraguayo. Las ciudades de Ituzaingó (Argentina) y Ayolas (Paraguay) serán las más beneficiadas, fortaleciendo el tejido económico local.
El proyecto es especialmente destacable por su bajo impacto ambiental, ya que utiliza una infraestructura existente sin generar nueva superficie inundada ni requerir la relocalización de familias. La inversión total demandará alrededor de US$ $450 millones, con el objetivo de maximizar el aprovechamiento de un recurso hídrico que, por décadas, generó una pérdida económica para ambos países al fluir sin utilizar su potencial energético.
Redacción por dataPORTUARIA