El sector industrial argentino dedicado a la molienda de oleaginosas y al desmote de algodón representa un componente económico significativo a nivel global. Los empleados que desarrollan sus tareas en estas plantas conmemoran anualmente su día el 29 de octubre, una fecha que encuentra su origen en un proceso de centralización organizacional dentro de la actividad.

La elección de la fecha se remonta a 1947, y está vinculada a la constitución formal de la Federación de Obreros y Empleados de la Industria Aceitera y Afines (FOEIA). Previo a este hito, la representación de los operarios se encontraba distribuida en entidades de alcance local. La necesidad de establecer un marco de representación unificada que trascendiera las fronteras provinciales llevó a la convergencia de diversas estructuras en una federación de carácter nacional. La creación de la FOEIA significó la consolidación de una estructura capaz de dialogar y establecer acuerdos colectivos de trabajo aplicables de manera homogénea en toda la geografía productiva del país.

La labor de los trabajadores aceiteros es esencial para el flujo del comercio exterior argentino. Este sector no solo es el principal generador de divisas del país, sino que los operarios cumplen un rol logístico fundamental en toda la cadena de valor, desde el procesamiento de la materia prima hasta la carga de buques en los puertos. Su compromiso asegura que la producción de aceites y subproductos oleaginosos, que posiciona a Argentina como líder mundial, se mantenga eficiente y competitiva en el mercado internacional.
Redacción por DataPortuaria