El maíz es un producto forrajero esencial para las actividades ganaderas de la región, vinculadas principalmente a la producción bovina y porcina. Aunque los productores neuquinos suelen adquirir este grano de la pampa húmeda, la provincia posee condiciones agroecológicas y ambientales que hacen viable el cultivo local.

El Centro PyME-Adeneu (Ministerio de Economía, Producción e Industria) llevó a cabo un ensayo experimental en San Patricio del Chañar con cuatro híbridos de maíz. La ingeniera agrónoma Luciana Tempone, referente del Programa Forrajero, informó que los materiales genéticos utilizados arrojaron rendimientos estimados promedio de 10,5 toneladas de grano por hectárea.

Las experiencias previas realizadas en ambientes de valle bajo riego precordilleranos también alcanzaron buenos rendimientos cuando el maíz fue utilizado para elaborar reservas de calidad. Tempone aseguró que la Patagonia Norte se perfila como una región prometedora debido a su clima favorable, la menor incidencia de plagas y el potencial de altos rendimientos, lo que podría convertirla en un polo importante para la producción de maíz de alta calidad.
El manejo como factor clave:
La disponibilidad de agua es fundamental, dado que el maíz es una especie de crecimiento estival con elevados requerimientos hídricos. Si bien el clima, la cantidad y calidad del agua y del suelo presentan condiciones excelentes, el manejo es clave. Esto incluye la gestión eficiente del riego, la nutrición balanceada y la elección de híbridos con ciclos adaptados a la zona.
Actualmente, el maíz se desarrolla de forma intensiva y en superficie limitada en la provincia (principalmente en Añelo), siendo mayoritariamente utilizado para autoconsumo del ganado bovino. No obstante, las experiencias demuestran la viabilidad del cultivo, aunque su implementación debe depender de las características propias del establecimiento y el destino final de la producción.
Redacción por DataPortuaria