El Gobierno confirmó que no prorrogará la suspensión temporal de las retenciones a la carne vacuna de novillo y a la carne aviar. Según fuentes oficiales, a partir del 1° de noviembre volverá a regir el 5% de derechos de exportación. La carne de vaca (que ya estaba exenta) mantendrá el 0% del tributo.

La medida de alícuota cero había sido dispuesta a fines de septiembre como parte de un paquete de alivio impositivo para el agro. Su finalización genera preocupación en el sector ganadero, que teme que el retorno del 5% restará competitividad y previsibilidad en un contexto donde las exportaciones se estaban recuperando.
Expertos en el sector señalan que el impacto fiscal de mantener el beneficio sería limitado. El consultor Víctor Tonelli estimó que el costo para el Estado por la exención total a la carne vacuna sería de unos U$D150 millones anuales. Sin embargo, Tonelli advirtió que el regreso del tributo "restará entre 3% y 4% de la rentabilidad total del negocio exportador", afectando a frigoríficos y productores con márgenes ajustados.
Actualmente, las exportaciones de carne vacuna alcanzan un alto nivel, cercano a los U$D4.600 millones al año. De ese total, las dos terceras partes U$D3.000 millones son las que vuelven a quedar alcanzadas por el 5%.

Tanto Carlos Castagnani (CRA) como Daniel Urcía (Fifra) coincidieron en que el momento es inoportuno, ya que el sector estaba mostrando señales de dinamismo y se abrían oportunidades con la ampliación de la cuota a Estados Unidos. Urcía remarcó que mantener la alícuota cero sería una señal de confianza, mientras que su eliminación frena el impulso y resta previsibilidad al crecimiento exportador.
Redacción por DataPortuaria