

¿Cuál es el impacto de la incorporación de tecnología de largo alcance en la capacidad de vigilancia de los vastos espacios marítimos argentinos? La Armada Argentina ha recibido el segundo avión P-3 Orion de un total de cuatro unidades adquiridas a Noruega. La aeronave ya se encuentra operativa en la Base Aeronaval Comandante Espora, cercana a Bahía Blanca, y cumplirá funciones esenciales de patrullaje, exploración y control soberano.
El ministro de Defensa, Luis Petri, enfatizó que la llegada de este segundo P-3 Orion contribuye a la recuperación de la capacidad de control y respuesta de la Aviación Naval. El objetivo estratégico es garantizar que Argentina cuente con los medios necesarios para proteger sus recursos marítimos, su territorio y su soberanía, especialmente en la vasta extensión de la milla 200.
La adquisición incluye tres unidades P-3C, configuradas para la exploración y el control del Atlántico Sur, y una unidad P-3N, destinada a funciones de transporte y apoyo logístico. El Ministerio de Defensa ha señalado que esta flota proporcionará la capacidad para detectar y perseguir actividades de pesca ilegal que impactan en los recursos marítimos nacionales.
El P-3 Orion, desarrollado por Lockheed Martin, es un avión de exploración marítima y guerra antisubmarina. Está equipado con cuatro motores turbohélice Allison T-56-A-14, y posee características técnicas que lo hacen idóneo para la tarea: tiene un radio de acción de 1.500 millas náuticas (2.780 km) y una autonomía de vuelo de 12 horas. Esta capacidad le permite cubrir de manera sostenida el litoral marítimo argentino, la plataforma continental y la Antártida.
Esta incorporación representa un paso clave en la restauración de la capacidad de patrulla oceánica de largo alcance, una capacidad que se había visto mermada tras el retiro de las antiguas aeronaves P-3B Orion. Se espera que las dos unidades restantes del lote lleguen a territorio argentino a lo largo del año 2026.
Redacción por DataPortuaria