

El mercado de fletes para el crudo Urals que se transporta desde los puertos occidentales de Rusia hacia la India evidencia una escalada de precios, según fuentes especializadas de la industria. Este fenómeno se produce tras un aumento significativo en el volumen de cargas registrado en el último mes.
A pesar de las sanciones y aranceles impuestos por Estados Unidos, las refinerías indias han mantenido sus compras de petróleo ruso. Esta postura desafiante se enmarca en un contexto de incremento en las exportaciones de crudo desde puertos clave como Primorsk, Ust-Luga y Novorossiisk. En septiembre, estos envíos alcanzaron un récord de 2,5 millones de barriles diarios, superando en 500.000 barriles las cifras de agosto, impulsados por paradas no programadas en refinerías.
Los costos de transporte del crudo Urals desde los puertos bálticos han ascendido a alrededor de $7 millones por buque Aframax para cargas a finales de octubre. Esta cifra representa un aumento considerable respecto a los $6-6,5 millones que se registraban entre finales de agosto y mediados de septiembre. De manera similar, los fletes desde el puerto de Novorossiisk en el Mar Negro, utilizando buques Suezmax, se elevaron a aproximadamente $6,2-6,5 millones, en contraste con los cerca de $6 millones de hace un mes.
Según informantes de Reuters, la “flota en la sombra” y armadores griegos continúan operando en el transporte de este tipo de crudo, lo que sugiere que las restricciones no han logrado disuadir a todos los participantes del mercado.
En respuesta, los ministros de Finanzas del G7 han anunciado nuevas medidas conjuntas para intensificar la presión sobre Rusia y sobre aquellos que facilitan la evasión de sanciones. Esta estrategia se materializó recientemente con la detención por parte de Francia del buque tanque Boracay, que transportaba 100.000 toneladas de crudo Urals con destino a la India. El presidente francés, Emmanuel Macron, calificó la acción como parte de una nueva táctica para limitar los ingresos de Moscú, mientras que el presidente ruso, Vladimir Putin, condenó el abordaje, tildándolo de un acto de piratería.
Redacción por DataPortuaria