

Al menos tres buques cargados con gas natural licuado (GNL) se desviaron del terminal de GNL de Zeebrugge en Bélgica, según datos de la agencia LSEG. Este desvío se produjo mientras activistas de la organización ambientalista Greenpeace bloqueaban las instalaciones en protesta por las continuas importaciones de gas ruso por parte de la Unión Europea.
Bélgica se ha posicionado como el segundo mayor importador europeo de GNL ruso, con 2,3 millones de toneladas métricas recibidas entre enero y agosto de 2025, solo por detrás de Francia, que en el mismo período recibió 4 millones de toneladas.
Analistas de LSEG señalaron que los buques Megara y Rias Baixas Knutsen, ambos con carga proveniente de Estados Unidos, y el LNG Phecda, que transporta gas ruso, habrían modificado su curso. Adicionalmente, el Arctic Voyager, procedente de Noruega, también podría enfrentar retrasos. Según los datos, el Arctic Voyager
tenía prevista su llegada para la noche de hoy, mientras que los otros tres se esperaban a lo largo de la semana.
Greenpeace inició su manifestación el miércoles por la tarde, utilizando kayaks, balsas salvavidas y un velero para bloquear la entrada del terminal. La protesta se dirige contra las importaciones de GNL ruso a la UE en el contexto del conflicto en Ucrania.
Fluxys, el operador del terminal, informó que la acción se espera que continúe hasta el domingo, aunque agregó que no ha habido un impacto significativo en las operaciones ni en el flujo de salida del terminal. Un portavoz del Puerto de Amberes-Brujas indicó que otros buques con cargas no destinadas al terminal de GNL no han sufrido interrupciones, pero deben avanzar con mayor precaución debido a las protestas.
El contexto de la protesta se enmarca en la intención de la UE de prohibir las importaciones de GNL ruso un año antes de lo previsto, como parte de un nuevo paquete de sanciones contra Moscú, tras la presión ejercida por el presidente estadounidense Donald Trump.
Redacción por DataPortuaria