

Las importaciones de fueloil a la Costa del Golfo de Estados Unidos se han incrementado en septiembre hasta alcanzar su nivel más alto en dos años y medio. Este fenómeno se debe al aumento de cargamentos provenientes de Medio Oriente, ya que las refinerías estadounidenses buscan alternativas para mitigar la disminución del suministro de crudo pesado, especialmente desde Venezuela.
El sector de refinería de la Costa del Golfo, que alberga más del 55% de la capacidad total del país, ha estado incrementando las importaciones de fueloil para cubrir el déficit generado por la caída en el suministro de crudo pesado. En septiembre, las internaciones de fueloil ascendieron a 541.000 barriles por día, según datos de Kpler, lo que representa el nivel más alto desde febrero de 2023.
Las importaciones de fueloil desde países del Golfo Pérsico alcanzaron máximos históricos en agosto y septiembre, impulsadas por el aumento de volúmenes provenientes de Arabia Saudita, Irak y Kuwait. Según Hoa Nguyen, propietario de la firma Sparta, el fin de la temporada de generación eléctrica en Medio Oriente ha liberado más barriles de fueloil para satisfacer la alta demanda en la Costa del Golfo de Estados Unidos.
Una de las principales causas detrás de este cambio es la caída en el suministro disponible de crudo desde Venezuela. De acuerdo con la Administración de Información Energética (EIA), las importaciones de crudo venezolano cayeron a 6.000 barriles por día en julio. El analista sénior de Kpler, Roslan Khasawneh, indicó que esto ha privado a las refinerías de valiosos suministros de crudo pesado, obligándolas a recurrir a importaciones de fueloil.
Las refinerías de la Costa del Golfo están diseñadas para procesar crudo pesado y ácido, características típicas de los grados latinoamericanos. Cuando esos suministros se reducen, las refinerías pueden recurrir al fueloil, que puede ser transformado en productos de mayor valor como gasolina y diésel. El proceso es impulsado también por la disminución de las reservas de fueloil residual en Estados Unidos, que han caído a 20,63 millones de barriles, por debajo de los 29,2 millones registrados en 2021, antes de la invasión de Ucrania.
Redacción por DataPortuaria