

Compradores chinos han reservado al menos 10 cargamentos de soja argentina, cada uno de 65.000 toneladas métricas, luego de que Argentina suspendiera por un mes las retenciones a las exportaciones. Esta compra, según reporta Reuters, representa un revés para los productores estadounidenses, que ya están excluidos de este mercado clave y afectados por los bajos precios.
La medida impositiva de Argentina hace que su soja sea más competitiva, impulsando a los comerciantes chinos a asegurar cargamentos para sus inventarios del cuarto trimestre. Este período, que usualmente está dominado por los envíos estadounidenses, se ha visto afectado por la guerra comercial entre Washington y Beijing.
Según operadores del mercado de granos, los envíos están programados para noviembre. China, el mayor comprador mundial de soja, aún no ha adquirido ningún cargamento de la cosecha de otoño estadounidense. Rodolfo Rossi, presidente de Acsoja, comentó que China tiene dificultades con la soja brasilera, lo que aumenta la demanda de la soja argentina.
Johnny Xiang, de AgRadar Consulting, indicó que la eliminación de los impuestos a las exportaciones argentinas hizo que los precios de la soja fueran "más atractivos para los compradores chinos".
Sin embargo, el analista agregó que es probable que el impacto sea de corta duración, ya que la política durará poco más de un mes y el suministro general de Argentina es limitado.
En el mercado internacional, los futuros de harina y aceite de soja en China cayeron un 3,5% tras la medida argentina. Esto se explica, en parte, por el favorable margen de molienda para los compradores chinos.
Redacción por DataPortuaria