

La inversión se dividirá en dos etapas: una licitación privada para la reparación de los muelles por 13 millones de dólares, seguida de un desembolso de otros 17 millones de dólares en equipos e infraestructura complementaria. Los ejecutivos de Ultramar confirmaron que esta inversión forma parte de su compromiso dentro del contrato actual, que finaliza en 2032, y no se utilizó para negociar una extensión de la concesión.
El principal impulsor de estas inversiones es el negocio de la minería argentina, que promete valiosas cargas de exportación. La apuesta de Ultramar es posicionar al Puerto de Rosario como un centro logístico clave para el envío de minerales, aunque también tienen planes para desarrollar otras cargas contenerizadas, generales y especiales. Además, los ejecutivos expresaron su interés en resolver la situación con su socio minoritario, el grupo Vicentín, que posee el 10% de TPR, para poder allanar su expansión de negocios en la región.
El gobernador Pullaro comprometió todo el apoyo de la provincia y su acompañamiento para la búsqueda de cargas. También resaltó la intención de su gestión de impulsar la logística fluvial y su activa participación en las negociaciones por la licitación de la hidrovía que lleva adelante el Gobierno nacional. Asimismo, Pullaro sugirió a la empresa buscar un acuerdo con la Municipalidad de Rosario para resolver los conflictos tributarios históricos.
Tras la reunión, ambas partes destacaron el buen clima y el ánimo de colaboración, lo que fue un factor clave para activar las inversiones.
Redacción por DataPortuaria