

El reporte destaca que los recientes ajustes en la política comercial de Estados Unidos han demostrado cómo los cambios, incluso los moderados, pueden alterar los flujos globales, afectando especialmente a países con alta integración en cadenas de producción. En América Latina, el Manufacturing Intra-Industry Trade Index 2024 muestra que Brasil (46,6) y México (52,2) son las economías más expuestas a este fenómeno.
La UNCTAD identifica tres consecuencias principales de este escenario:
Aumento de costos y menor crecimiento: Las empresas se ven forzadas a reorganizar sus cadenas de suministro y acumular inventarios, lo que eleva sus gastos operativos y desalienta la inversión en nuevos proyectos.
Incremento de riesgos financieros: Los cambios inesperados en las políticas comerciales afectan los tipos de cambio, la confianza de los inversores y las condiciones de crédito, creando un entorno financiero más volátil.
Erosión de la confianza global: La debilidad de las reglas y las acciones unilaterales de algunos países fomentan un ciclo de represalias que obstaculiza la cooperación internacional necesaria para la estabilidad del comercio.
El informe también destaca el fenómeno de los envíos anticipados, que ocurre cuando las empresas adelantan sus embarques para evitar la aplicación de nuevas medidas. Por ejemplo, los envíos aéreos a EE. UU. aumentaron casi un 10% en el primer trimestre de 2025, un pico seguido por una caída en las importaciones. Para los países menos desarrollados y sus pequeñas empresas, esta incertidumbre es aún más perjudicial debido a las limitaciones de infraestructura y crédito.
Para mitigar los efectos de este “arancel invisible”, la UNCTAD sugiere una serie de acciones clave, como la implementación de avisos previos sobre cambios en políticas, la adopción de medidas comerciales transparentes y una mayor coordinación internacional.
Además, el organismo subraya la importancia de la diversificación de mercados y la participación en acuerdos comerciales sólidos. China, por ejemplo, ha demostrado que las exportaciones pueden seguir creciendo incluso si se reducen los envíos a un mercado clave como EE. UU. En el caso de América Latina y Argentina, donde el comercio depende en gran medida de productos básicos, diversificar y fortalecer los acuerdos comerciales es una estrategia crucial para reducir la vulnerabilidad frente a las políticas imprevisibles.
Redacción por DataPortuaria