

El cronograma actualizado contempla 45 meses de construcción y 25 años de operación, totalizando aproximadamente medio siglo de actividad. Durante la etapa de construcción, la compañía estima que se alcanzará un pico de 5.900 trabajadores en sitio, una cifra superior a la proyección inicial de 4.000. En la fase de operación, el promedio de empleados subirá a 1.060 personas.
La principal modificación técnica del proyecto es el aumento del inventario de mineral explotable a 1.425 millones de toneladas, lo que eleva la tasa de procesamiento diario a 175.000 toneladas. Este rediseño busca explotar el potencial de la cuenca cuprífera de San Juan.
En cuanto al uso de agua, el nuevo IIA ajusta al alza las estimaciones, proyectando una necesidad de reposición externa de 1.200 litros por segundo en picos de producción. Para cubrir esta demanda, se prevé un esquema multifuente que incluye campos de pozos en Argentina y, en una etapa posterior, agua desalinizada proveniente de Chile, sujeta a permisos binacionales. La empresa destacó que el 73% del agua de la planta se abastecerá de recirculación interna para reducir la presión sobre las fuentes externas.
Vicuña Corp también adjudicó obras viales clave que mejorarán la conectividad de Josemaría y generarán 120 empleos directos e indirectos. La provincia de San Juan, por su parte, se consolida como el destino más atractivo para la inversión minera en Argentina. Según un informe del Instituto Fraser, San Juan se ubica en el puesto 14 a nivel global, superando a jurisdicciones mineras tradicionales como Chile y Perú.
Redacción por DataPortuaria