

La provincia de Córdoba acaba de inaugurar su primer “Punto Bio”, una instalación especializada para el abastecimiento seguro y controlado de biocombustibles destinada a la flota pública de vehículos. El nuevo espacio, ubicado en el predio de la Dirección Provincial de Vialidad en la capital cordobesa, es la primera estación de este tipo bajo gestión provincial y suministra B20, una mezcla compuesta por un 80% de gasoil y un 20% de biodiésel.
La iniciativa se enmarca en la Ley Provincial N° 10.721 de Promoción y Fomento de los Biocombustibles y busca reducir la dependencia de combustibles fósiles, fomentar la producción local y generar un efecto positivo en la economía regional. Mariano Santillán, titular de Biocombustibles y Bioenergías, señaló que la estación “permite hacer un expendio de forma segura”. La provincia, que integra la Liga de Provincias Bioenergéticas, también promueve su modelo con otras jurisdicciones como Santa Fe y San Luis.
La apertura del Punto Bio se da en un escenario de tensión política y económica con el Gobierno nacional. Representantes del sector, junto al gobernador Martín Llaryora, manifestaron su rechazo a un proyecto de ley que modifica la Ley 27.640. Según las autoridades provinciales, la propuesta reduciría la obligación de corte de alcoholes y naftas a un máximo del 12% y eliminaría ocho artículos de la normativa vigente. Los ministros Sergio Busso y Pedro Dellarossa denunciaron que la medida “busca favorecer a las petroleras”.
Por su parte, Patrick Adam, de la Cámara de Bioetanol de Maíz, advirtió que la eliminación de un corte mínimo obligatorio “podría generar una caída abrupta en la demanda”.
Frente a este escenario, productores y autoridades provinciales trabajan en una propuesta alternativa que será presentada en el Congreso , con el objetivo de proteger las inversiones y garantizar que los biocombustibles continúen como una pieza clave en la transición energética nacional.
Redacción por DataPortuaria