

La conversión de la Ruta Nacional 18 en autovía avanza en Entre Ríos, perfilándose como una obra para optimizar el transporte de cargas en la región. Una vez finalizada, esta nueva infraestructura no solo fortalecerá la circulación entre los principales nodos logísticos del Litoral argentino, sino que también consolidará la integración del país al corredor bioceánico central, que conecta los puertos chilenos del Pacífico con el sur de Brasil.
Vialidad Nacional, a través del 17° Distrito Entre Ríos, informó que los trabajos continúan en distintos frentes del tramo comprendido entre el arroyo Sauce Grande y la localidad de Las Tunas. El objetivo principal es mejorar la capacidad operativa y aumentar la seguridad de este corredor estratégico que vincula regiones esenciales para la producción y el comercio exterior.
Actualmente, las obras incluyen la construcción de la segunda calzada, retornos e intersecciones, además de trabajos sobre terraplenes, sub bases y capas asfálticas en los accesos a los puentes Quebracho, Curupí y Espinillo. También se realizan tareas de mantenimiento, construcción de refugios para usuarios del transporte público y desmontes en el acceso a la Aldea San Antonio. Para permitir el avance sostenido de las obras sin comprometer la circulación, se realizan desvíos controlados en puntos clave como los accesos a Seguí, Viale y la intersección con la Ruta Provincial 32.
El impacto directo de esta transformación se reflejará en los flujos logísticos locales. Al convertirse en autovía, la RN 18 mejorará la eficiencia del transporte entre zonas productivas como Viale, Villaguay y Colonia Avellaneda, facilitando la circulación de cargas agrícolas, industriales y de servicios. La reducción en los tiempos de viaje y en los costos operativos beneficiará especialmente a las empresas exportadoras e importadoras que operan desde y hacia los puertos del Litoral. Este nuevo trazado permitirá descomprimir otras rutas, disminuyendo la siniestralidad y ofreciendo mayor previsibilidad en los tiempos de entrega.
Más allá del impacto local, la reconversión de la RN 18 adquiere una dimensión regional al formar parte del corredor bioceánico central, una red que articula el comercio terrestre entre los océanos Atlántico y Pacífico. Este corredor conecta los puertos chilenos de Coquimbo y Valparaíso con Porto Alegre, en el sur de Brasil, pasando por Argentina a través de rutas estratégicas como la 18, que a su vez se vincula con la RN 14 y otros ejes troncales del Mercosur. En ese marco, la autovía funcionará como un punto neurálgico para el tránsito internacional de mercaderías, fortaleciendo el posicionamiento del país como paso logístico clave en el comercio regional.
Redacción por DataPortuaria
Fuente: Movant Connection