

Pan American Energy (PAE) ha anunciado el inicio de la construcción del gasoducto de mayor capacidad de Argentina, destinado a la exportación de gas licuado desde Río Negro. Esta obra es una pieza fundamental dentro del plan “Argentina LNG”, encabezado por YPF y acompañado por socios nacionales e internacionales. El proyecto prevé llevar la producción de Vaca Muerta hasta una terminal flotante en el Atlántico, y el ducto tendrá una capacidad de al menos 50 millones de metros cúbicos diarios.
El plan está impulsado por el consorcio Southern Energy, conformado por PAE, YPF, Pampa Energía, Harbour Energy y Golar LNG. Las compañías avanzan en una estructura técnica que combina gasoductos de alta capacidad con buques licuefactores (FLNG). La primera etapa de “Argentina LNG” contempla el buque “Hilli Episeyo”, que comenzaría a operar en 2027 en el Golfo San Matías, en la provincia de Río Negro. Esta unidad flotante de licuefacción (FLNG) procesará gas proveniente de la Cuenca Neuquina, mediante una inversión inicial estimada en US$300 millones. Será la primera infraestructura de este tipo en las costas argentinas, marcando un hito en la estrategia de exportación de gas natural licuado (GNL).
El presidente de YPF ha señalado que países como Alemania, India, Japón y Corea del Sur figuran entre los principales mercados objetivo para el gas argentino. La visión de largo plazo busca posicionar a Argentina como un actor relevante en el mercado global de GNL. Recientemente, YPF firmó un acuerdo con la energética italiana Eni para avanzar en la tercera fase del proyecto. Se trata de un head of agreement (entendimiento preliminar) que marca el camino hacia la Decisión Final de Inversión (FID), la cual debería definirse antes de fin de año. Este acuerdo, celebrado con la presencia del presidente y la primera ministra italiana, representa un hito dentro de un proyecto ambicioso que prevé una inversión total de US$100.000 millones a lo largo de 20 años. La iniciativa busca articular toda la cadena de valor del GNL: desde la producción de gas en Vaca Muerta, hasta el transporte, licuefacción offshore y posterior exportación.
Actualmente, parte del gas se canaliza por el gasoducto San Martín, pero se prevé su reemplazo gradual por el nuevo ducto. La estructura en construcción facilitará una conexión directa entre los pozos neuquinos y la costa atlántica, lo que reducirá costos y aumentará la eficiencia en la exportación. PAE ya incrementó su producción de gas con el objetivo de alcanzar los 20 millones de metros cúbicos diarios, volumen que permitirá garantizar contratos a largo plazo y dar respaldo a la operatoria marítima.
El impacto regional se anticipa como uno de los beneficios más inmediatos del proyecto. La obra requerirá servicios logísticos, personal técnico y proveedores locales, generando oportunidades concretas para las economías de Neuquén y Río Negro. Este nuevo ducto, además de reconfigurar la infraestructura energética, introduce una nueva lógica exportadora basada en buques.
"La licuefacción en origen abre un mercado global para Argentina", concluyeron desde el consorcio.
Redacción por DataPortuaria
Fuente: Mundo Maritimo