El Comando Conjunto Marítimo (COCM), dependiente del Comando Operacional de las Fuerzas Armadas, intensificó las actividades de control en los espacios navales de jurisdicción nacional cercanos a la milla 201. Las operaciones son llevadas a cabo por buques y aeronaves de la Armada Argentina para monitorear la intrusión de flotas foráneas, que se estima que serán más de 400 embarcaciones.

El refuerzo de vigilancia, en plena temporada de pesca, busca disuadir a naves extranjeras que intenten realizar actividades ilegales y preservar los recursos naturales de la Nación, al tiempo que refuerza la alerta Estratégica del Sistema de Defensa Nacional.

Actualmente, la corbeta ARA Robinson, junto al patrullero oceánico P-3C Orion perteneciente a la Escuadrilla Aeronaval de Exploración, efectúan el control del Mar Argentino junto a diversas unidades del Comando de la Flota de Mar. El COCM aprovecha el despliegue de unidades que operan en la Antártida, para de esta forma ampliar el operativo de custodio náutica 

Estas operaciones son llevadas a cabo por buques y aeronaves de la Armada Argentina, bajo el control operacional del COCM, especialmente en la zona donde cada año recala el calamar, recurso clave para la pesca nacional.

En relación con ello, el presidente de la Liga Naval Argentina, Fernando Morales,  explicó que “ahora se viene la época fuerte porque empiezan a llegar los buques chinos, porque el calamar sobre todo se pesca desde fines de noviembre, principios de diciembre hasta fines de marzo, principios de abril. Por eso, en esta época del año hay más controles”. 

Además, Fernando Morales precisó que “la pesca ilegal es un delito económico, no es un delito penal, sino que es una infracción arancelaria. En la supervisión del mar está el instrumento militar a través del Comando Conjunto Marítimo y el instrumento policial, a través de la Prefectura Naval”.

El trabajo conjunto con la Comisión Nacional de Actividades Espaciales facilita la adquisición de imágenes satelitales del Mar Argentino, lo que permite localizar posibles navíos que desactiven sus sistemas de identificación automática con el fin de operar de manera no colaborativa.

A partir de este verano, también se iniciarán inspecciones a los barcos extranjeros que pescan merluza negra, krill y pez de hielo al sur del paralelo 60°, en cumplimiento con la Convención para la Conservación de los Recursos Marinos Antárticos.