La comisaria europea de Sanidad, Stella Kyriakides, declaró al respecto “por primera vez proponemos unas metas de reducción obligatorias, unos objetivos claros y reglas que reducirán un 50 % el uso de pesticidas en la UE para 2030”.
Además, explicó que no se impondrán con un enfoque único, sino que “tendrán en consideración el progreso histórico y nacional en el uso de pesticidas de cada Estado miembro”.
En esta línea, el jefe de política ambiental de la Unión Europea, Virginijus Sinkevicius comentó que la propuesta requeriría que los países de la UE tomen medidas en al menos el 20% de la tierra de la UE para 2030.

Además de reducir en un 50% el uso de fitosanitarios para fines de la década, se prohibirán por completo en lugares como parques públicos y áreas protegidas.
“Los agricultores recibirán un apoyo total con posibilidades de financiación de la UE sin precedentes para cubrir el costo de la transición”, indicaron desde la Comisión.
La reducción en el uso de fertilizantes y pesticidas podría reducir los rendimientos de trigo en el territorio de la UE. Respecto a ello, Philippe Mitko, presidente de Coceral, una asociación que representa el comercio agrícola, adelantó que “podría convertir al bloque en un importador neto de granos”
Esta propuesta se enmarca en las nuevas estrategias adoptadas durante el mes de mayo por la Comisión Europea: Estrategia sobre la biodiversidad para devolver la naturaleza a nuestras vidas y estrategia de la granja a la mesa, con el objetivo de un sistema alimentario equitativo, sano y respetuoso con el medio ambiente.