Por primera vez en 20 años, el euro y el dólar se encuentran en paridad debido al declive de la moneda europea.
Con una cotización virtual de 1 a 1, el euro está registrando su nivel más bajo desde diciembre de 2002, año en que la moneda europea se lanzó oficialmente.
En lo que va de 2022, la cotización del euro frente al dólar tuvo una caída de más del 11%. Esto representa un duro golpe ya que, años atrás, llegó a cotizar casi 1,6 frente a la moneda norteamericana.
El desplome de la moneda única está relacionado con los actuales problemas energéticos que enfrenta la Unión Europea, lo que podría generar que su economía entre en recesión.
Además, la Reserva Federal de Estados Unidos ha subido sus tasas para combatir la inflación, mientras que el Banco Central Europeo se mantiene más cauteloso, lo que no le permite controlar el aumento de los precios.
Hace unos días, el analista financiero Christian Buteler explicó que “la estrategia del BCE es un error, debería subir la tasa a los efectos de absorber más dinero y poder bajar la inflación; incluso la Unión Europea corre el riesgo de una mayor inflación que Estados Unidos por los problemas energéticos”.
En este sentido, esta semana el BCE anunció que subiría sus tasas de interés en 25 puntos básicos, lo que representará el primer aumento desde 2011. Sin embargo, teniendo en cuenta que desde hace ocho años el BCE aplica una tasa de depósito negativo (-0,50%) y que la FED aún tiene más margen de maniobra, muchos creen que el aumento debería ser de, por lo menos, 50 puntos básico.
