Según un estudio realizado a nivel nacional para el sudeste de la provincia de Buenos Aires, el Ingeniero destaca que “los cultivos de trigo y cebada se encuentran en excelentes condiciones debido a las precipitaciones acontecidas durante los últimos meses”

En cuanto a estos cultivos de invierno, “los cultivos de trigo transitan la etapa de encañazón y pleno inicio de floración, a la espera del aporte de precipitaciones”. Esta situación es favorable para el mercado, teniendo en cuenta el aumento en la demanda del cultivo.
“La cebada se encuentra en etapa de espigazón y llenado de granos” en lotes sembrados más temprano, “sin situaciones de daños por heladas como en otras zonas del centro de la provincia de Buenos Aires”
Con respecto al girasol, explicó que “el avance es incipiente pero a ritmo sostenido, con una estimación del 11% del área proyectada para nuestra zona”. Esta misma tendencia muestran los cultivos de maíz.
Por otro lado, destacó que las áreas tienen buena disponibilidad de humedad y que “se irán incrementando las siembras de estos cultivos de gruesa”. Además, informó que “con el aumento de temperaturas se acelera la incorporación de lotes de siembras tempranas”
También, mencionó que se llevan a cabo trabajos sobre los cultivos “para la prevención de daños por enfermedades que podrían poner en riesgo, en cierta forma, los rindes”. En este contexto, citó la presencia de la enfermedad mancha en red en la cebada, “con una mayor presión respecto a las campañas anteriores, donde es necesario aplicar estrategias de doble control”.
En algunos cultivares de trigo “han aparecido presencias de roya amarilla en etapa reproductiva y roya anaranjada en menor proporción”. Para combatir ambos hongos, “se están aplicando fungicidas en forma temprana”.

Por último, comentó que “se están llevando a cabo estrategias de control de malezas en barbechos destinados a siembra de gruesa para aquellas especies difíciles de erradicar”