No hubo víctimas y solo se tienen que lamentar daños materiales en la estructura de la terminal portuaria, específicamente en la cinta transportadora y tolvas.
Horas después del accidente, el Consorcio de Gestión de Puerto Quequén, a través de su área de Seguridad, activó los protocolos de contingencia en el marco del Código Internacional para la Protección de los buques y de las Instalaciones Portuarias (PBIP). Se desplegaron mallas flotadoras para cercar el producto en la zona del siniestro, evitando todo impacto ambiental y sanitario.
El accidente sucedió dentro de las instalaciones concesionadas a la empresa Pier Doce, durante la operatoria del buque COREFORTUNE OL, 199 metros de eslora y 32,26 de manga, que se encontraba desestibando 11.380 toneladas de Map y Dap, fertilizantes sólidos. Aunque no pudo terminar la descarga de la totalidad de la mercadería, el buque quedó en condiciones de desatracar.
Los pasos a seguir por el Consorcio será realizará las pericias correspondientes, dando intervención a la Prefectura Naval Argentina, como organismo de control, para investigar y determinar causas y responsabilidades.

